Dejamos atrás Chengdu, la ciudad conocida mundialmente por los osos panda y, ciudad donde hacer una parada para ver el Gran Buda de Leshan y salimos a las 7:30 en un tren hacia Xi´an.
Xi´an es la capital de la provincia de Shaanxi y una ciudad de tamaño medio comparado con otras ciudades chinas. Los dos caracteres que forman su nombre «西安» significan literalmente «Paz Occidental».
Nuestro hostel está al lado de una boca de metro, así que en la estación buscamos el metro y enseguida llegamos al Ancient City International Youth Hostel.
Metro más cercano Beidajie, salida B.
El hostel estaba genial, aquí solo íbamos a pasar una noche y con lo chulo que nos pareció casi nos dio pena. Tiene una sala común con sofás, billar y cafetería con un café caro pero muy rico. Hablan inglés y nos dieron un mapa para recorrer lo más importante en las horas que teníamos por Xi´an. Teníamos lo que nos quedaba de mañana y la tarde noche, ya que al día siguiente íbamos a ver los guerreros de Terracota y no sabíamos el tiempo que nos iba a costar.
Cogimos el metro en Beidajie Station y fuimos hasta Zhonglou. Esta zona es el centro de Xi´an y donde puedes ver lo turístico y, la esencia de la ciudad en su barrio musulmán.
Al salir del metro ya te encuentras con la Torre de la Campana y al otro lado de la gran plaza la Torre del Tambor. Ambas fueron construidas para albergar los instrumentos que en la antigüedad marcaban las horas.
Torre de la Campana
La Torre de la Campana se construyó por primera vez en 1384 en otra zona de la ciudad y desde 1582 está en su ubicación actual.
Precio: 35 Rmb o 17 Rmb con descuento estudiante.
En esta zona puedes ver una mezcla entre tradición y bullicio. Unos niños muy bonicos, como decimos en mi tierra, se acercaron a nosotras para practicar su inglés. Nos encontramos con ellos tres veces, y nos hicieron prácticamente las mismas preguntas, debíamos ser de las pocas extranjeras que había en ese momento por la zona, pero y nos hicieron pasar un rato muy divertido.
Al fondo, Torre del Tambor
La Torre del Tambor es de 1380 y ha sido restaurada como casi todo. En su interior hay una colección de tambores y si te asomas puedes ver unas buenas vistas de la plaza.
Precio: 35 Rmb o 17 Rmb con descuento estudiante.
Barrio musulmán
Justo al lado comienza el barrio musulmán. La etnia Hui vive y trabaja en los múltiples negocios que hay en este laberinto de calles.
La etnia Hui está entre las cinco minorías más numerosas de China. En su mayoría pertenecen étnica y lingüísticamente a la etnia Han (la mayoritaria en China), pero con la salvedad de que ellos profesan la religión musulmana y sus diferencias sobre todo respecto a vestimenta y comida. Los hombres llevan un fez de color blanco y las mujeres llevan el velo.
Puedes encontrar similitudes con un zoco árabe. Respecto a la gastronomía tienen las brochetas de carne de cordero especiadas que bien podrías tomar en la playa Jemaa el Fna de Marrakech.
Vendedor de sandías gigantes con la camiseta remangada, típico de algunos hombres chinos para llevar mejor el calor.
En esta zona puedes comer por menos de 5 € si puedes comer de todo. Brochetas de cordero, sopas, dumplings y, lo que más vimos fue lo que llamaban Rou Jia Mo 肉夹馍 la «hamburguesa de China» que es pan de pita con carne estofada en su interior, mis amigas la probaron y le ponen un seis y medio de nota.
A mi me resultó complicado comer algo consistente en esta ciudad la verdad, porque cuanto más al norte, más utilizan el trigo. A las brochetas de carne, les suelen echar salsa de soja, así que si quieres probarlas, diles que no puedes tomarla.
La Gran Mezquita, Da Qingzhen Si
En este barrio, además de comer y comprar algún souvenir, se encuentra La Gran Mezquita, Da Qingzhen Si, construida en el año 732 y una mezcla perfecta de estilos arabe-chino.
El horario de visita es de 8:00 a 19:30 y aunque habíamos leído que había que pagar, al llegar, nos facilitaron una casaca verde, bastante bonita por cierto y entramos sin pagar nada. Con el calor que hacía no apetecía mucho pero hay que respetar las costumbres religiosas de los lugares que se visitan.
Sus jardines fusionan perfectamente estilos del budismo con aires árabes. Hay inscripciones tanto en caracteres chinos como en escritura árabe. En uno de sus pabellones hay una copia manuscrita del Corán, que data de la dinastía Ming.
Continuamos callejeando y la verdad que esta ciudad tiene una curiosa variedad religiosa. Por la misma zona puedes encontrar un templo taoista, arcos budistas y sobre todo, gente reunida jugando a sus juegos tradicionales o charlando. Es un barrio con mucho ambiente.
De aquí ya salimos en busca de la boca de metro más cercana para ir a la parada de Yongningmen, junto a la Muralla.
Muralla de XI´an
La Muralla de Xi´an es considerada la mejor conservada dentro de una ciudad. Mide 14 kilómetros y cada 120 metros hay una torre de vigilancia.
La mejor forma para recorrerla es en bici y por 45 Rmb puedes alquilar una para 2 horas.
Entrar a la muralla cuesta 54 Rmb y 27 Rmb con carnet de estudiante.
Nosotras ya llegamos que era media tarde y nos dio tiempo a acercarnos y verla por fuera. Una pena pero quedará pendiente para una posible vuelta. La ventaja fue que vimos anochecer allí y como la van iluminando conforme cae la noche.
Estábamos sentadas en la plaza mirando hacia la puerta sur cuando de pronto unos amables policías todos alineados y sujetando una cinta, nos fueron echando hacia atrás para que quedara despejada toda la zona. Al principio no sabíamos muy bien que era lo que pasaba pero de pronto empezamos a ver chicas y chicos vestidos con trajes tradicionales y caímos en un cartel que habíamos visto que ponía » Chang´an Impression Performance. VIP Ticket 580 Rmb, Ordinary Ticket 260 Rmb».
Teníamos una sed increíble porque el calor era intenso y en lo que nuestra vista alcanzaba a ver, no veíamos ni un bar o chiringuito para comprar agua. Vimos a gente con alguna botella y les preguntamos. Nos indicaron (entre chino y gestos) que en el metro. Bajamos las escaleras y en 5 máquinas que había, no quedaba nada de agua, así que tuvimos que coger coca cola y limonada.
Ya de vuelta a la superficie, sonaba por megafonía primero en chino y luego en inglés, la historia de la dinastía Ming que iban a representar.
Desde donde te dejan estar puedes ver un poco el espectáculo y la verdad que tiene muy buena pinta.
Volvimos al metro para ir a cenar algo y al hostel que queríamos preguntar en la recepción que nos recomendaban para ir al día siguiente a los Guerreros de Terracota.
A la mañana siguiente ducha, recoger maleta y bajamos a desayunar. El hostel tiene varias opciones para elegir y como ya os he contado, un café muy rico. Cada desayuno + café sale por 38 Rmb.
Cómo ir a los Guerreros de Terracota ⇓
A menos de 100 metros de nuestro hostel, el Ancient City International Youth Hostel, hay una parada de bus donde puedes coger el número 103 o el número 9, ambos te llevan a la estación de autobuses general. Nada más subir, le dije y le enseñé al conductor la foto de los guerreros y el, muy amable, cuando tocaba bajar, nos avisó.
Desde donde bajas, tienes que andar recto y a la izquierda. Enseguida ves la estación de autobuses. Si la miras de frente, tienes que ir hacia la derecha por donde verás autobuses azules aparcados, en concreto tienes que buscar los que pone el número 306.
No tiene pérdida porque en cuanto te ven, vienen a por ti.
El precio del bus es 8 Rmb por persona y el trayecto dura 1 hora y 25 minutos.
Una vez bajas del autobús, fuimos directas a las taquillas.
Horario y precio
De marzo a noviembre de 8:30 a 18:00 y cuesta 150 Rmb /75 Rmb con descuento estudiante y de diciembre a febrero de 8:30 a 17:00 y cuesta 120 Rmb / 60 Rmb con descuento estudiante.
Si eres de los que te gusta que te cuenten la historia con detalle, en la puerta hay personas que hablan inglés que se ofrecerán para guiarte, por unos 200 Rmb o si lo prefieres, algo más económico, están las audio guías por 40 Rmb (con 200 Rmb de depósito).
Nosotras habíamos leído en el trayecto la historia más o menos y además, dentro hay carteles en inglés que lo explican bastante bien.
Lo que vas a encontrar en su interior es uno de los hallazgos arqueológicos más importantes del mundo y declarado Patrimonio de la Humanidad de la Unesco en el año 1987.
Este ejército subterráneo de más de 8.000 guerreros y caballos de terracota, ha guardado silenciosamente el alma del primer unificador de China durante más de dos milenios. Qin Shi Huang estaba aterrorizado por los espíritus vencidos que lo esperaban en la otra vida o, como creen algunos arqueólogos, esperaba que su gobierno continuara en la muerte como lo había hecho en la vida, por eso quiso ser enterrado junto a todos estos guerreros y caballos.
El descubrimiento de este ejército de guerreros fue fortuito. En 1974, los campesinos que perforaban un pozo descubrieron una bóveda subterránea que eventualmente produjo miles de soldados de terracota y caballos en formación de batalla.
El recinto se divide en tres pabellones 1, 2 y 3. Para que el 1 te impresione más recomiendan verlos al revés, pero la verdad que nosotras llegamos pronto y pensamos que era mejor ir directas al 1 para que no nos aplastara la masa de gente que suele acompañar cualquier lugar turístico en China.
Pabellón 1
El pabellón 1 se cree que contiene 6000 guerreros (solo 2000 están en exhibición) y caballos, todos orientados hacia el este y listos para la batalla. Estaban acompañados por 35 carros, aunque al estar hechos de madera, se han desintegrado por el paso del tiempo.
Aunque todos ellos parecen similares desde la distancia, si te fijas en su atuendo se pueden ver diferentes categorías de soldados y oficiales y las caras, son diferente. Se encontraron artículos de bronce, que se guardan en un museo.
En el pabellón 2 hay alrededor de 1300 guerreros y caballos, puedes examinar de cerca a cinco de los soldados que están expuestos en urnas de cristal: un arquero arrodillado, un arquero de pie, un soldado de caballería y su caballo, un oficial de rango medio y un general.
Arquero arrodillado
Soldado de caballería y su caballo
El pabellón 3 contiene 72 guerreros y caballos; se cree que es el cuartel general del ejército debido a la cantidad de oficiales de alto rango desenterrados aquí.
Si llegas muy pronto podrás ir viéndolo un poco a tu aire, pero solo diría que es imposible. Nosotras hicimos la visita en unas dos horas. Hay tiendas para comprar detalles y figuras de los guerreros que están bastante bien.
Un agua fresca dentro del recinto para intentar llevar el calor nos costó 5 Rmb.
Conforme vas hacia la salida hay algún restaurante por si quieres comer algo o hacer alguna compra de última hora, que es lo que hicimos nosotras. Vimos nuevamente las figuras de los guerreros de distintos tamaños y Maruxi no se pudo resistir. Regateamos todo lo que se pudo y al final se llevó la que medía 25 centímetros por 50 Rmb (6,25 €).
Encontrar el autobús que te lleva de vuelta a la ciudad nos costó un poco. Andamos por el parking buscando autobuses verdes con el número 915 pero no había manera. De pronto una señora mayor se acercó a nosotras y nos decía algo que no entendí.
Le dije: 去西安的公交车 Qù xī’ān dì gōngjiāo chē (Autobús a Xi´an) muy a lo indio y claramente, ella ya sabía que buscábamos eso, porque se puso a correr haciéndonos el gesto de que corriéramos con ella. La seguimos y en la salida hacia la carretera, paro un bus, debió preguntar si había sitios libres y nos subimos, pagando 8 Rmb. Imaginamos que cobrará comisión o algo, pero a nosotras nos hizo un favor.
Ya dentro con el aire acondicionado, descansamos un rato.
De vuelta en la estación de buses, queríamos comer en un lugar con aire acondicionado. Por los alrededores, no nos acababa de convencer ningún restaurante, como ya os he contado más arriba, Xi´an no nos resultó un sitio fácil para comer.
Entramos en uno que era cadena de comida rápida china. Las «hamburguesas chinas» costaban entre 9 y 12 Rmb y yo me pedí un plato de arroz blanco con ternera y alguna verdura. Comí poquito, porque no me daba mucha seguridad aunque creo que conseguí que no pusieran soja.
Mi mochila con fruta y frutos secos, me salvó bastante en esta ciudad.
Caminamos hacia el metro para volver al hostel a echar un café y recoger maletas, que a las 19:05 salía el tren desde la estación del norte hacia Pingyao, nuestro siguiente destino en nuestro viaje de 25 días por China.
[…] XIAN […]
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