A las 8.00 nos recoge el minibus para ir a la Muralla. Esta excursión la hemos contratado en el Hotel porque la verdad que por la calle no se ven muchas agencias de tours como en otros países. Nos ha salido por 380 ¥ cada uno e incluye recogida en el Hotel, Muralla en la zona de Badaling (la más cercana a Beijing), comida con visita a una tienda-joyería con explicación de la piedra de Jade, Tumbas Ming y visita a una Tea House con demostración.
Llegamos a la Gran Muralla, Badaling sobre las 9:15. Durante el trayecto el guía ha ido explicando cosas curiosas de China y su historia.
El aire es cortante y las manos se te quedan congeladas si te quitas un guante, pero no todos los días estas por aquí.
Comenzamos a subir por el lado de la derecha, que a pesar de todo lo leído, casualidad o no, hoy está bastante vacía de turistas, hay ratos que vamos solos.
Yo subo hasta la segunda torre y allí me paro, tengo vértigo y me da la sensación de que luego me va a costar mucho bajar… una pena pero preferimos no tentar a la suerte.
Rubén sube hasta arriba y las vistas son impresionantes. El tramo no es excesivamente largo comparado con otras zonas de la muralla pero si estás pocos días, puede ser una buena opción y si tienes vértigo, el primer tramo se puede llevar bien.
Aquí hemos hecho unas cuántas fotos y los chinos también nos han pedido salir en sus fotos.
Hay alguna tienda de recuerdos y un bar donde tomar algo.
De vuelta al bus, nos han llevado al restaurante con joyería. Eran aproximadamente las 12:00 y tras una explicación sobre la piedra de Jade y una vuelta por la tienda, nos hemos ido a tomar un café con la pareja americana y el chico portugués, Afonso, sin L, que habla español.
De aquí hemos pasado al restaurante y total que la chica de Estocolmo también era celiacs. La comida no parecía con gluten, pero por si acaso, nos han sacado unas verduras a parte para ambas que mezclado con el arroz, estaba bueno. Un detalle, la verdad.
Tras un rato, no muy largo, vuelta al bus, dirección Tumbas Ming, que son una muestra de la arquitectura funeraria imperial China, y que se hicieron aquí siguiendo los principios del feng shui. La cordillera montañosa abriga las tumbas por tres de sus lados.
Por último, hemos ido a la Tea House. Nuestra profesora, Nancy nos ha explicado 6 tipos de te, sus propiedades y como se hacen.
Ha estado divertido y sabroso, ya que los hemos podido probar. Al final, te explican los precios de los packs por si quieres comprar.
Nosotros al principio no queríamos pero Nancy es buena comercial, y finalmente, cogemos algo de te y nos regala un Pipi Boy, que es un muñeco como de arcilla que si le echas agua por encima hirviendo, sale un chorrito por su … Esta gracioso, durante la demostración lo ha ido usando y salpicando a la chica americana.
Son las 15:50 y nos van a ir repartiendo a los hoteles, pero como queremos llegar a la Ciudad Prohibida el guía nos indica que mejor nos bajemos los primeros con el en una parada de metro y probemos. Así lo hacemos y aprovechamos a que el propio guía nos cambie dinero. Hasta el momento es el mejor cambio que nos han hecho y nos ha cogido billetes doblados.
Ya en el metro, vamos dirección Tiananmen. Salimos y corremos, pero conforme te acercas está lleno de militares que te van cortando el paso y derivando por los pasos subterráneos. Es difícil entender la cantidad de militares y policías que hay en esta plaza si no lo ves.
Hoy si conseguimos entrar a la Plaza de Tiananmen, por fin!!!, pero a la Ciudad Prohibida no nos dejan avanzar, son las 16.35 y cierra a y media, por los pelos pero tendrá que ser para la próxima visita a Beijing.
En la parte norte de la plaza se agolpa la gente y nos acercamos. Es la bajada de bandera y hacen una ceremonia todos los días por la mañana y por la tarde, con su desfile militar correspondiente. Ver la emoción que tienen los ciudadanos chinos puede resultar interesante.
Justo antes de que acabe, le digo a Rubén de ir saliendo para evitar la avalancha pero de pronto acaba y la masa viene hacia nosotros, hay de todo en China, pero lo de empujar es algo que si practican, aunque no lo siento como mala educación sino como costumbre.
Queremos ir al Mercado Wangfujing y como está a una parada fuimos andando. Se encuentra fácil, justo en la salida del metro ves Hoteles y una calle principal de tiendas y con El Centro Comercial APM entre otros. Solo ver esta calle ya es chula, llena de luces y de gente de todo tipo. A unos 30 metros ya ves a la izquierda el Mercado WangFujing. Es muy chino, en que entras ya ves insectos a la parrilla y todos te ofrecen su comida. Hay puestos de Duplings muy variados, insectos, Dim Su (sin gluten) tienen una fina capa de arroz, se cocinan al vapor y contienen cebollino y alguna verdura más. También vimos una especie de salchichas gordas, a las que llamamos «Longaniza de Graus», nada que ver, pero de pinta daba el pego.
Hay puestos de pato y bastante marisco que no sabría decir que era. También bastantes cosas dulces que no probamos por qué no sabíamos que contenían exactamente.
Merece la pena verlo. También hay una parte para comprar regalos en la que puedes regatear bastante, porque de entrada te piden cifras algo altas.
Como ya sabéis, nos está haciendo bastante frío, debe haber una temperatura de -5 con aire y humedad, así que nos metemos al H&M a entrar en calor. Es el Centro Comercial APM y de allí pasamos a Zara donde nos probamos cosillas.
Yo continúo con mis problemas con el wifi y vamos a Starbucks que nos han dicho que es donde mejor funciona, además de que tiene enchufes porque voy sin batería de tanta foto que he hecho.
Al principio nada, pero cambio el registro de cuenta de la VPN que me descargue en España para pasar el cortafuegos a Google entre otras y ¡Eureka!, funciona.
Echamos aquí el resto con nuestro te de 30 ¥ ( 4 €) y volvemos a casa dando un paseo de una media hora. Nos suena que estamos cerca y no nos sale más la cosa,